Al choque contra todos

Las legitimaciones que los vecinos le otorgaron en las elecciones del 2015 y 2017, parecen haber sido un cheque en blanco para Víctor Aiola. Desde el comienzo de su gestión, el jefe comunal, no escatimó esfuerzos para confrontar con instituciones que en algún momento pensaron distinto o que visibilizaron una parte de la realidad diferente a la de él.

No se salvó casi nadie. Atacó por igual a Bomberos, Red Solidaria, Músicos Unidos, Centros Tradicionalistas, Docentes, Medios de Comunicación, Liga Deportiva, APACHA, dirigentes opositores, entre otros.

Aiola no soporta la realidad que le toca vivir a la Argentina y no es capaz de realizar una sola autocrítica, sino todo lo contrario, suele atacar al que piense distinto. Esa obsesión por creer tener la verdad absoluta llegó al limite de ser el organizador de una marcha con la consigna “Los buenos somos más” en la que un puñado de funcionarios y algunos militantes marcharon por el centro de nuestra ciudad mientras “los malos” seguían la cobertura que hacían los medios desde sus hogares.

El raid comenzó con Bomberos, a los que criticó duramente por resistirse a las medidas del gobierno provincial que significaban un recorte del 60% en el presupuesto de la institución. Luego fue el turno de la reconocida Red Solidaria, que alertados por la difícil situación social que vivía nuestro país, organizaron una colecta de alimentos; en esa ocasión Aiola desestimó los dichos de uno de los referentes de la Red, Jose Bega, que afirmaba que 1000 familias de nuestra ciudad estaban atravesando un difícil momento económico y social.

También les tocó a los Centros Tradicionalistas, a los que el intendente, en declaraciones a Radio Líder, sacrificó con un “Acá cualquiera se compraba un Pony y una bandera y tenía un Centro Tradicionalista”. En esa misma entrevista, condenó a algunos medios de comunicación al afirmar que “Acá cualquiera se compraba una antena y una papa y ponía una radio”. ¿Sabrá Aiola cuanto dinero se destina de las arcas municipales a esas “papas y antenas”?. Una pista, mucho.

Los docentes no quedaron afuera de las críticas de Aiola. En pleno reclamo por aumento salarial de los maestros, el intendente les salió al cruce por reclamar sus derechos. Lo mismo hizo con los Sindicatos de Trabajadores, que al adherirse a un paro para reclamar mejoras en sus condiciones laborales el intendente dijo que “Esa gente que hace paro quiere que le vaya mal a la Argentina”.  

No zafó ni su colega, el Dr. Marcos Merlo, al que Aiola le dijo que: “en el debate, parecía anestesiado” (refiriéndose al debate de precandidatos a concejal en 2017). Enumerar los dichos descalificando a opositores llevaría varias páginas más, por lo que en esta ocasión vamos a omitir.

La Liga Deportiva y los clubes son un capítulo aparte. Sin nombrarlo, pero aludiendo al Club Social de Chacabuco dijo que “hacen piletas que pareciera que estuviésemos en Miami”. A los clubes integrantes de la liga deportiva Aiola les dijo que muchos “no están rindiendo el dinero que se les otorga”, frase que desencadenó una solicitada de la liga para repudiar estos dichos.

La protectora de animales, APACHA, fue blanco también de duras criticas del intendente y de la decisión de quitarles las llaves de la guardería canina, impidiendo así, el ingreso de los voluntarios, hecho que también provoco una dura carta contra Aiola de los representantes de APACHA.

Musicos Unidos también fue de la partida, ya que cansados “del ninguneo del ejecutivo” decidieron suspender su histórico festival.

Las enfermeras y empleadas de las Cooperativas de Trabajo también sufrieron las degradantes declaraciones de Víctor Aiola, quien se refirió a ellas diciendo “las enfermeras de la guardia del Hospital están pintándose las uñas y viendo telenovelas venezolanas en horario de trabajo”, y agregó que “le dieron trabajo a las cooperativistas pero lo hicieron renegar un montón”. El Partido Justicialista emitió también un comunicado al respecto.

La poca o nula autocrítica también ha hecho estragos en la planta de funcionarios. Recordemos que un plato de albóndigas, le costó el puesto al fotógrafo oficial y los directivos del colegio tuvieron que salir en lugar del intendente a dar explicaciones.

Hoy también se conocieron las declaraciones que hizo luego de que Red Solidaria organizara una jornada con almuerzo en el Barrio Alcira de la Peña, dijo Aiola: “Al vecino no se le ayuda haciendo un almuerzo en una plaza de vez en cuando”.

Estas son algunas de las varias veces que Aiola atacó sin anestesia a instituciones, personas y todo aquel que no comparta su visión de la realidad. Seguramente falten algunas, pero este breve resumen acercará al lector una realidad difícil de ocultar.

La misma gente que lo puso en ese lugar en 2015, puede devolverlo “al llano”, en pocos meses, o en algunos años; y el ahora intendente deberá volver a ser ese médico pediatra que es empleado municipal y deberá cruzarse diariamente con personas e instituciones a las que dañó con sus palabras. En ese momento, no tendrá una banda de aplaudidores que le festejen sus bravuconadas.

A fin de cuentas, ya lo dice la canción: “nada es para siempre”.