“Una porquería” proyectada por alguien que “debe andar en avión” y no circula por las calles de Chacabuco. Estas fueron algunas de las definiciones que se utilizaron en la sesión del Concejo Deliberante al hablar de la obra de remodelación de cuatro cuadras de la avenida Garay, que se hizo en el último tramo de la gestión del exintendente Víctor Aiola a partir de un proyecto que en su momento fue presentado por el arquitecto Lucas Tedesco, del área de Obras Públicas.
El tema llegó a la sesión, que se hizo este miércoles en Castilla, a través de un proyecto de resolución presentado por el concejal Ezequiel Martínez, de La Libertad Avanza Chacabuco. En su iniciativa, el edil pidió que sean eliminados los canteros -también llamados “islas”- que se construyeron sobre el sector de calzada en la intersección de la avenida con las calles Brandsen y Coronel Suárez.
En su fundamentación, Martínez cuestionó varios aspectos del proyecto de la avenida Garay, que en su momento fue presentado como una alternativa para remozar el centro comercial que existe en esa arteria. El edil consideró que la ciudad de Chacabuco “no está preparada para este tipo de obras”, sin dejar de señalar que se trató de “una buena idea que no se pudo terminar o hacer bien”. También puso el acento en que en la tercera y la cuarta cuadra -entre Coronel Suárez y Viamonte- los trabajos quedaron incompletos, porque, entre otras cosas, no se hicieron las rampas de acceso a las ciclovías.
En el articulado del proyecto, Martínez solicitó al Departamento Ejecutivo que se proceda a la “eliminación” de los canteros ubicados en las intersecciones de la avenida Garay con las calles Brandsen y Coronel Suárez, así como “la nivelación del suelo y la correcta señalización del espacio, asegurando la continuidad y visibilidad de la bicisenda”.
Durante el tratamiento del tema, el concejal Alejandro Cieri, del Pro, señaló que “cuando se pensó la obra el concepto era correcto”, pero luego “hubo errores técnicos”.
“Fue una buena idea que en la práctica tuvo errores”, insistió Cieri, para quien “el que la proyectó debe andar por Chacabuco en avión”.
Más dura aún fue Sofía Silva, de Unión por la Patria, que en los tiempos en que se hizo la obra ya era concejal y, recordó, con su bloque se opuso a que se hiciera este plan de remodelación.
“Casi que rogamos que no se hiciera la obra”, expresó en alusión a lo que sucedía en esos tiempos y a las quejas de los propios vecinos de la avenida.
“Digamos que eso era una porquería”, dijo Silva para sintetizar en varias ocasiones, que mencionó algunos problemas derivados de este proyecto, como las filtraciones de agua que provocó su ejecución en el sótano de un comercio situado en la esquina de Garay y avenida Alfonsín. También señaló las fallas que hay en los desagües pluviales, que se ven en las acumulaciones de agua que se dan, cada vez que llueve, en la cuadra de Garay en la que se encuentra la plaza del Hospital.
Por último, la concejal señaló la necesidad de evaluar qué trabajos se pueden hacer para corregir algunos de los defectos de la obra, los cuales, dijo, “no van a costar 2 pesos”.
A la hora de la votación, y contra la posición del autor del proyecto, que planteaba aprobar la resolución directamente, se decidió enviar el expediente a comisión para continuar estudiándolo.

Nooooo…, una porquería no, un ejendro, parece mentira q’ sea diseño de un profesional. Cuántos $$$$ municipales se fugaron por ahí? 😡😡😡😡😡😡😡😡😡