“Repudiamos todas las voces negacionistas”

El Intendente Darío Golía participó hoy del acto organizado por la Comisión Memoria y Justicia Chacabuco, a cuarenta y ocho años del último golpe cívico-militar del año 1976. La ceremonia tuvo lugar en el Punto de la Memoria, dedicado a los detenidos desaparecidos chacabuquenses, ubicado en plaza San Martín, con la presencia de un nutrido grupo de vecinos y vecinas, así como las banderas de diferentes instituciones educativas.

Al hacer uso de la palabra, el jefe comunal expresó que “pasaron cuarenta y ocho años del inicio de una etapa trágica de nuestra historia, con una dictadura genocida que mediante la desaparición sistemática y la tortura, atacó a una generación que lo único que soñaba y quería era una sociedad mejor. Esa dictadura tenía como objetivo instalar un modelo económico, político y social tan injusto y desigual, que sólo podía imponerse a través del horror. Un modelo que tiene que ver con la cultura del individualismo, con la  extracción de los recursos y con el saqueo del país, ideas que han dejado secuelas en la actualidad de la Argentina. Por eso hoy tenemos que ejercer la memoria, abrazar y defender más que nunca estos 41 años de democracia ininterrumpida que tuvimos desde su regreso en 1983. Y debemos hacerlo sin retroceder ni un solo paso, en honor a la memoria de los 30.000 detenidos desaparecidos, nuestro mejor homenaje es seguir construyendo para lograr el objetivo que ellos perseguían de un país mejor”, dijo Golía.

Por su parte, la presidenta de la Comisión, Teresita Cassino, dio lectura a un documento elaborado por la agrupación que encabeza, en el que remarcaron que “la lucha de los organismos de derechos humanos continúa y no se abandona. La justicia no ha alcanzado aún a todos los responsables de los delitos de lesa humanidad”.

“Hoy recordamos lo ocurrido, la memoria de las vidas de los compañeros detenidos desaparecidos, y  repudiamos todas las voces negacionistas. Año tras año convocamos a la reflexión sobre el plan sistemático de desaparición de personas y la apropiación de más de quinientos bebés recién nacidos. Para instalar un proyecto económico neoliberal, se usó como método  el terrorismo de estado. Los genocidas buscaron silenciar la voz de la militancia mediante la represión, la censura y la instalación de un relato mentiroso que apuntaba a manipular a la sociedad.

Toda esa memoria resiste y continúa en estado de alerta para que el Nunca Más tan proclamado se haga presente cuando es necesario”, señalaron.

Seguidamente, el documento hizo alusión al gobierno de Javier Milei, manifestando que “cuando se atreven a decirnos desde el actual gobierno que todo lo hecho desde la etapa democrática es corrupto y descartable, pretendiendo que creamos que todos los derechos conquistados, que todos los avances en materia de derechos humanos, sean de ciencia, salud o políticas de género, están mal, insulta nuestra historia. Insistimos en que el hecho de que circulen discursos de odio, emanados de los máximos responsables de nuestra nación, no es en vano. Hace pocos días, atacaron, abusaron sexualmente y amenazaron con armas a una militante de H.I.J.O.S. Este atentado contra su vida es un ataque político. Los autores materiales  pintaron en la pared la sigla “VLLC” (Viva la libertad carajo). Recalcamos: los discursos de odio  se traducen en sucesos violentos”, sostuvieron en el documento.

Finalmente, se mencionaron a los desaparecidos chacabuquenses Haroldo Conti, Liliana Ross, José Cassino, Jorge Dimattía, Marta Mónica  Claverie, Eduardo Cagnola, María del Carmen Pregal y Roberto Carnaghi y se colocó una ofrenda floral al pie de la placa donde figuran sus nombres.