El resultado de ayer, sin dudas, demostró que la grieta en el país existe y que, claramente, la expresan Milei y Cristina.
Las posiciones intermedias, representadas en la mayoría de las opciones por personalidades de la política con mucho prestigio, ya no representan al electorado. Este se muestra más preocupado por evitar el regreso del kirchnerismo que por lo que haga o deje de hacer Milei.
Todo lo que vimos en los días previos a la elección —ya sea la inestabilidad cambiaria y financiera, o los resonantes casos como el de Espert y sus presuntos vínculos con el narcotráfico, además del tema de las coimas que involucran a Karina Milei— no parecen haber movido el amperímetro.
El Gobierno ha presentado el rescate de Estados Unidos al Banco Central y al Tesoro como un logro increíble, cuando en realidad fue una demostración de la endeblez de la economía y del programa libertario.
Sin dudas, el peronismo está totalmente carente de liderazgo, con Cristina presa y furiosa con los caciques del conurbano y los gobernadores.
Un párrafo aparte merece la decisión de gran parte del PRO, con Macri y Ritondo a la cabeza, y con “el Colo” Santilli haciéndose cargo del tramo final de la campaña. Luego del episodio Espert, y junto a Montenegro, aportaron los votos necesarios para dar vuelta una elección que nadie preveía.
Sin dudas, y por más que lo nieguen los libertarios y el propio Milei, esta epopeya hubiera sido imposible sin el apoyo recibido por parte de la dirigencia y los simpatizantes amarillos.
El mensaje “Kirchnerismo o Libertad” fue lo que el votante privilegió a la hora de emitir su voto. Sabiendo que no hay posibilidades inmediatas de mejora en salarios y jubilaciones, prefiere apostar a la esperanza en el futuro antes que continuar con el camino del populismo.
Seguramente, con el correr de los días y los meses, se conocerán los cambios, leyes y reformas que serán enviadas al Congreso. De ellas dependerán gran parte de las transformaciones que necesita el país para que, de una vez por todas, podamos pensar que valió la pena el enorme sacrificio que está realizando el pueblo.
*Luis Speranza | Dirigente del PRO.
Muy buen comentario
Los K nunca mas