PUBLICACIÓN PEDIDA

“La Educación en Argentina, ¿es prioridad?”

Solicitada del Bloque de Concejales de Juntos por el Cambio.

Si bien en estos días los principales titulares de los medios fueron el nombramiento del “super” Ministro, los alegatos “contundentes” de los fiscales en la causa vialidad contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y la perspectiva de inflación que los especialistas ubican cerca al 100%, no podemos dejar de estar atentos a muchos otros problemas sociales que se van profundizando día a día.

La educación está atravesando una de las crisis más profundas históricamente: los docentes, agotados y desgastados por una pandemia que atravesaron sin herramientas ni capacitaciones y con la falta de decisiones políticas institucionales, incluso, muchas escuelas permanecieron y permanecen aún sin personal jerárquico.

En materia de infraestructura y sin aprovechar los casi dos años sin clases presenciales, la Provincia de Buenos Aires no se preocupó por las obras que hacían falta y cuando volvió la presencialidad nos encontramos con más de 300 colegios con clases suspendidas por el frío.

Mientras tanto, alumnos y familias sufrían un sistema de clases a distancia, donde no todas las familias contaban con dispositivos para conectarse a las clases virtuales o no contaban con la cantidad necesaria, en el caso de familias con hermanos y/o padres docentes. Situación agravada totalmente en instituciones altamente vulnerables como la Asociación Máximo Gil. Los gobiernos nacional y provincial recién pudieron dar respuesta a esto el 11 de enero de este año, cuando apareció en el boletín oficial el decreto de entrega de dispositivos. En nuestra ciudad, los señores Moro y Golía anunciaron en aquellos días la entrega de tablets por su gestión… que finalmente están por llegar, a dos años y medios del inicio de la pandemia y en el último cuatrimestre del ciclo corriente.

Por último, cerca del 30 % de los alumnos de la ciudad de Chacabuco que concurren a las escuelas mediante el sistema de transporte escolar esta semana no pudieron ir a clases debido a las demoras en el pago del servicio (de más de 100 días). Situación justificada en que “no todo el servicio estaba cortado”.

La situación pudo resolverse, gracias a la gestión municipal que asumió el problema con un aporte mayor a los tres millones y medio de pesos.

Es así, como en este contexto donde nos permitimos preguntar…. La educación en la argentina, ¿es prioridad?

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