“Hubo dirigentes que negaron a Néstor cuando vino en el 2002”

Fabián Ayala y Micaela Olivetto reflexionan sobre el 10º aniversario del fallecimiento de Néstor Kirchner.

Fabián Ayala (presidente del Bloque de Unidad Ciudadana):

“Era Julio de 2.002 Néstor Kirchner visitaba Chacabuco por primera vez, recuerdo el frío en la noche, claro seguramente las bajas temperaturas no afectaban en nada al Pingüino que irradiaba calor propio.

Días atrás en una reunión de militantes la conducción del Partido Justicialista había advertido: “no vayan, no le hagan número porque lo trae el Frente Grande, viene por afuera del Partido”, pero yo con la definición de siempre “el peronismo es un Movimiento no un Partido” no quería perderme aquel encuentro, por eso concurrí.

Recuerdo que un periodista me dijo en la vereda del cine Español ¿qué haces acá? esto te va a traer consecuencias. Quizás tenía razón, pero siempre consecuente con mis ideales estaba contento de ser de la partida.

Néstor se paró en el escenario del cine y dijo todo lo que después hizo ante casi cien personas. Sin embargo, para mí lo más importante había sucedido antes, lo había esperado a la salida del Palacio Municipal y cuando él apareció con quienes lo habían invitado me acerco a ellos y a Néstor le estiré la mano, ni recuerdo lo que le dije, pero él me abrazó y me dijo ¡vamos compañero! y ese abrazo quedó para siempre en mi recuerdo.

Luego lo vi en otras ocasiones, pero nunca me acerqué demasiado a él, pues Kirchner ya tenía el abrazo de tantos militantes, incluso de aquellos dirigentes que lo negaron en aquel invierno y son los “eternos amigos del campeón”, claro ellos van y vienen según soplan los vientos.

Ahora en tiempos de pandemia extraño abrazos, pero tengo la certeza que pasado este angustioso tiempo y pueda abrazar a los compañeros de Unidad Ciudadana, en ese momento sentiré que volví a abrazar a Néstor.

Micaela Olivetto (diputada provincial – Frente de Todos):

“Son días muy movilizantes para la militancia, yo siempre digo que Néstor vino a proponernos un sueño y yo me animé a soñar. Me sume a la militancia después de su paso a la inmortalidad, como miles de jóvenes que entendimos que debíamos ser protagonistas de nuestro tiempo. Acompañar a Cristina en este camino es el compromiso más grande que tenemos con Néstor.

Esta generación que despertó a la política gracias a Néstor, que la considera la mejor herramienta para transformar la realidad y que cuestiona sus formas tradicionales, es una generación que no afloja, no traiciona y no especula. Sabemos que honrar la memoria de Néstor es estar al lado de Cristina y es ser leales a nuestro pueblo. Es saber que la Patria siempre es el otro.

Honrar a Néstor es poner el corazón arriba de la mesa, y entregarlo en cada acto militante.

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