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Desde Red Solidaria Chacabuco compartieron con Chacabuco en Red un emotivo balance del festejo de Navidad realizado este sábado junto al Club de Amigos Inseparables (CAI), una iniciativa que desde hace más de once años brinda contención, acompañamiento y un espacio de encuentro para niños y niñas de la ciudad.
José Bega, integrante de Red Solidaria Chacabuco, explicó que en esta oportunidad el festejo se desarrolló en la casa de Gisela Molina, referente de un comedor comunitario con más de una década de trabajo ininterrumpido en Chacabuco.
“Este sábado se llevó adelante lo que fue el festejo de Navidad en el CAI, nuestro Club de Amigos Inseparables. En esta ocasión se llevó particularmente en la casa de Gisela Molina, una referente del comedor comunitario en la ciudad que tiene ya alrededor de 12, 13 años”, señaló.
Bega destacó el compromiso y la labor constante de Molina, a quien definió como “una amiga de la red que trabaja muchísimo por el prójimo y con quien estamos todo el tiempo articulando”.
Durante la jornada, los chicos pudieron disfrutar de inflables, juegos, metegol, helados y regalos, en un clima de alegría y encuentro. “Celebramos en su casa con inflables, con helados, con regalos, con metegol, con juegos y con juguetes”, relató.
Asimismo, agradeció especialmente al grupo que se encarga de cocinar y que acompaña al CAI una vez por mes durante todo el año. “Es impresionante cómo trabaja este grupo, al cual le queremos agradecer”, expresó, haciendo extensivo el reconocimiento a todos los grupos que pasaron durante el 2025 por el espacio solidario.
“Es mucho el compromiso, mucho el esfuerzo, mucho el tiempo, son muchas las donaciones y mucha la contención que se da para cada uno de los chicos”, remarcó Bega, quien también agradeció a toda la comunidad de Chacabuco por el acompañamiento sostenido durante más de once años.
En ese sentido, recordó que el CAI funciona dentro del marco del programa Patios Abiertos, en la Escuela N° 27, y manifestó el deseo de poder retomar allí las actividades. “El CAI es nuestra casa, funciona dentro del marco de Patios Abiertos en la escuela número 27, en la cual esperamos poder volver lo antes posible y trabajar con tranquilidad como lo hemos hecho durante todos estos años”, indicó.
Finalmente, Bega expresó el anhelo de que las dificultades atravesadas durante este año puedan resolverse para continuar con la tarea solidaria. “Esperamos prontamente poder volver a trabajar con tranquilidad, para seguir abrazando y conteniendo a nuestros chicos, a los hijos y a las hijas de nuestra ciudad de Chacabuco, para que ese ratito de sábado tengan contención, abrazos, amor y la comida compartida en la mesa”, concluyó.
