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En el Concejo Deliberante se encuentra desde hace varias semanas un proyecto presentado por la Asociación Celíacos de Chacabuco que contiene una serie de propuestas en favor de los vecinos que sufren esta enfermedad autoinmune. Uno de los puntos plantea que los supermercados de la ciudad tengan góndolas específicas en las que se exhiban productos libres de gluten. También se impulsan reducciones en la tasa de Seguridad e Higiene para los establecimientos gastronómicos que ofrezcan en forma permanente una opción en este tipo de alimentos.
Integrantes de la Asociación se reunieron a finales de mayo con el presidente del Concejo, Tomás Domínguez, a quien le presentaron un proyecto de ordenanza, acompañado por gran cantidad de firmas, en el que se presenta el “Programa municipal de inclusión y protección para personas con celiaquía”, dentro del cual hay diversas propuestas relacionadas con acciones a implementar por el sistema de salud, el gobierno municipal y el sector comercial.
En principio, se señala que el programa deberá funcionar bajo la órbita de la Secretaría de Salud, en articulación con las áreas de Bromatología y Producción. Luego, entre las acciones a emprender, el proyecto plantea establecer la capacitación obligatoria en “celiaquía, manipulación segura de alimentos y prevención de contaminación cruzada” para todo el personal de establecimientos gastronómicos del partido de Chacabuco, así como de comedores escolares, hospitales, centros de atención a la infancia, geriátricos y otras dependencias públicas en la que se manipulen alimentos.
El artículo tercero propone crear un “régimen de estímulo fiscal para comercios amigables con la celiaquía”, lo cual podría incluir tener la prioridad en la difusión “desde los canales oficiales del Municipio” y un descuento de hasta un 20 por ciento en “la Tasa de Seguridad e Higiene o Tasa de Inspección” para los establecimientos “que ofrezcan, de forma permanente, al menos una opción segura y libre de gluten”.
Comercios amigables con la celiaquía
También se plantea la creación del Registro de Comercios Amigables con la Celiaquía, con el objetivo de “identificar, promover y difundir establecimientos que garanticen condiciones seguras para las personas con enfermedad celíaca”.
Más adelante, en el artículo quinto, se plantea la obligación, para todos los supermercados, mayoristas y minoristas, “de disponer de una góndola específica y claramente identificada para productos libres de gluten (sin TACC)”. La góndola, se agrega, deberá estar “debidamente señalizada”, así como “separada físicamente” de otras en las que haya productos que contengan gluten, “a fin de evitar riesgos de contaminación cruzada”.
En lo que respecta a las responsabilidades municipales, el proyecto establece que el sistema de salud debe garantizar el acceso al diagnóstico precoz y seguimiento clínico de personas con enfermedad celíaca, además de ofrecer “orientación nutricional”, y “promover campañas de concientización en centros de salud, escuelas y medios locales”.
A su vez, el área de Bromatología deberá encargarse del control del cumplimiento de “normas de higiene y manipulación de alimentos en establecimientos que ofrezcan productos sin gluten”. Para ello, se sostiene, deberán establecerse “inspecciones periódicas y sanciones para quienes incumplan lo dispuesto, incluyendo clausura preventiva y/o sanciones económicas”.
“Debe ser una política pública”
En los vistos y considerandos del proyecto, sus autores señalaron la necesidad de “garantizar los derechos de las personas con enfermedad celíaca en el partido de Chacabuco”. Además, recordaron que la enfermedad celíaca es una afección autoinmune que afecta a un porcentaje significativo de la población y requiere una dieta estricta libre de gluten.
También se expresó que la inclusión social y alimentaria de las personas celíacas “no puede depender únicamente del esfuerzo individual, sino que debe ser una política pública activa del Estado”.
