“No me quedan dudas de que querían matarme” dijo el vecino que resultó herido de un escopetazo

En una entrevista con Chacabuco en Red, Hernán Ciancio, acompañado de su abogado Darío Ciminelli, compartió su testimonio sobre el violento ataque que sufrió el pasado miércoles, cuando su vecino, un hombre de 81 años, le disparó con una escopeta tras una serie de disputas previas. El incidente ocurrió en calle Villegas, donde ambos residen, y dejó a Ciancio con cinco perdigones incrustados en su brazo derecho.

Según Hernán, el conflicto había comenzado días antes, relacionado con la posición de un vehículo estacionado, pero fue escalando con amenazas constantes por parte del agresor. “Me decía que me iba a hacer desaparecer o me iba a hacer cagar. Esas fueron las palabras exactas de él“, relató Ciancio.

El día del ataque, luego de una confrontación en la mañana, la situación empeoró en la tarde. Hernán contó que mientras cerraba la puerta de su casa, el vecino salió del garaje con una escopeta. “Salió, levantó el arma, apuntó y disparó. Tuve suerte de que la puerta estaba abierta y pude entrar. Me dio los perdigones en el brazo“, explicó, mostrando una venda que cubría su herida. “Gracias a Dios no había cerrado la puerta, si no, me agarra sentado en el auto o afuera“, agregó.

Tras el disparo, el agresor no se detuvo. Hernán detalló que el hombre, acompañado por su hija, intentó ingresar por la fuerza a su casa. “Empezaron a patear la puerta y a gritar: ‘Salí afuera, que te vamos a terminar de matar, vamos a terminar con vos’“, narró, visiblemente afectado. “Yo ya estaba herido, sangrando, y ellos seguían con las amenazas“.

El abogado de la víctima, Darío Ciminelli, explicó que han solicitado medidas judiciales para proteger a Hernán y a su familia. “Afortunadamente, desde la fiscalía ya fijaron pautas para que el agresor no vuelva a su domicilio y se mantenga una distancia entre las dos partes hasta que la situación se enfríe“, comentó Ciminelli, quien está conforme con las decisiones de la justicia. “Nuestra preocupación es poner fin a esta violencia y que cada parte pueda vivir en tranquilidad“.

Ciminelli también confirmó que la causa está caratulada como “homicidio en grado de tentativa”, lo cual implica una pena alta en expectativa. “La pena por homicidio es de 8 a 25 años, y en grado de tentativa, agravada por el uso de armas de fuego, se reduce de un tercio a la mitad“, explicó. Además, aseguró que, por el momento, el agresor no está en Chacabuco.

Finalmente, Hernán expresó su temor por las represalias: “Ellos siguen con las amenazas. No me quedan dudas de que querían matarme“.