La Unión Cívica Radical de Chacabuco publicó esta semana la convocatoria a elecciones internas que tendrá esa fuerza política en nuestra ciudad y en toda la provincia de Buenos Aires.
Según el cronograma, el 6 de septiembre es la fecha límite para la presentación de listas. Un mes después, el 6 de octubre, de 8 a 18 hs en Moreno 82 se realizarán las elecciones internas.
Con solo un puñado de charlas informales entre distintos sectores que componen el radicalismo local, una coinidencia es generalizada: el radicalismo no debería tener internas y debería conformar una lista de unidad.
Todos coinciden que en el actual contexto político, social y económico del país, es un gasto de tiempo y energías someterse a un proceso interno, y que hay otras prioridades.
Quien puso primera en esta contienda interna fue el sector conducido por el actual presidente de la UCR, Lisandro Herrera, que adelantó sus intenciones para continuar ejerciendo la presidencia del Comité Alem. “Es momento de una renovación, pero nuestro sector debería contuinuar al frente de la UCR”, había dicho el propio Herrera en una entrevista con Chacabuco en Red.
Según pudo saber este medio, Herrera no participará activamente de las negociaciones intentando imponer un candidato (ya que considera que su rol de presidente le exige otra cosa), pero ya hay un nombre que tiene ese sector para sucederlo en la presidencia. Es un joven que cuenta con el acompañamiento de la Juventud Radical y de varios militantes que militaron en la JR hace poco tiempo.
Otro de los sectores internos radicales es el de Evolución Radical, donde uno de sus dirigentes principales es el ex secretario de Gobierno, Mariano Cámera. Desde este sector también comparten la necesidad de llegar a la unidad, pero aseguran que aún no han sido convocados a ninguna reunión para debatir los nombres y lugares que llevaría esa lista de unidad. Actualmente, Evolución tiene la vicepresidencia del partido, a través de María Elena Bozzini.
El referente nacional de Evolución, es Marín Lousteau, quien se ve bastante cercano a Facundo Manes ( dirigente en quien se referencia el sector de Lisandro Herrera), por lo que hay optimismo en cuanto a poder llegar a un acuerdo entre esos sectores.
El ex intendente Víctor Aiola, está llevando con gran hermetismo sus acciones políticas partidarias. No está mostrándose en público, ni participando en los medios. Responde a quién pregunta que no está interesado en participar de la interna partidaria y que su trabajo está en colaborar con el proyecto político de Manes.
Sin embargo, nadie descarta que su opinión pueda pesar a la hora de tener que ubicar los nombres en la lista local.
Otro de los dirigentes que tuvo un gran protagonismo en los últimos años, es Alejo Pérez, que encabezó las últimas dos listas de Juntos en 2021 y 2023. Actualmente es concejal y secretario del Partido. En diálogo con Chacabuco en Red, Pérez fue tajante: “si hay unidad voy a estar, si hay internas que no cuenten conmigo“, aseguró.
Por el lado del dirigente que ostenta el cargo más alto dentro de los radicales de Chacabuco, está el senador provincial Agustín Máspoli, presidente además del bloque UCR en la Cámara Alta bonaerense. Por el rol que ocupa, está trabajando fuertemente en el armado provincial donde hoy hay dos grandes sectores diferenciados: el de Maximiliano Abad y Daniel Salvador y el de Facundo Manes y Martín Lousteau.
No obstante, Máspoli es una opinión autorizada dentro del Comité Alem y tendrá voz y voto en la conformación de la próxima lista radical.
En este contexto, el lunes se realizará un encuentro de la actual mesa partidaria para determinar el futuro y la forma en que se resolverá la renovación de autoridades en Chacabuco.