Historias de pescadores

Columna de Luis Ventimiglia para Chacabuco en Red. Hoy: “La Picasa, años sin pesca empieza a renacer”.

En la semana , mirando las publicaciones de nuestro grupo el  Cocodrilo Fishing Team vi una de un amigo Rodrigo González de Miguel que mostraba pejerreyes en La Picasa y me sorprendió porque hacía años que no se veían publicaciones del lugar,  así que no dude y comencé a charlar con él por chat, pasados 5 minutos ya habíamos arreglado para ir el domingo a relevarla y hacer una nota del lugar (cuando uno lleva la pesca en el alma suceden estas cosas no se necesita más de 5 minutos para armar un viaje).

Llegamos a San Gregorio, lugar de origen de Rodrigo quien nos esperaba junto a Esteban Franich y nos dirigimos hacia la laguna donde esperaban un grupo de amigos que nos dieron una mano para subir a la lancha (es de destacar que se baja en un campo y que no hay ningún tipo de servicios por el momento), ya que el lugar para bajar las lanchas es poco profundo así que fue difícil hasta que nos embarcamos.

El Cocodrilo estuvo compuesto en este viaje por Carlitos Crisci Jorge Porcu y quien relata quienes salimos temprano desde Chacabuco para estar a las 8 en el lugar.

Había mucha gente pescando de costa y veíamos que levantaban de a 2 o de a tres pejes de tamaños variados los que nos auguraba un buen día.

Pensamos va a ser un día fácil al ver esto, pero así es la pesca nunca es como la imaginas, la mañana no fue nada fácil, mucho viento al principio que hizo que no pudiéramos anclar donde queríamos nos obligó a garetear ligero y pescando de flote no logramos muchas capturas hasta el mediodía, solo unos 15 pejes de medianos a chicos y muchos fuera de medida que devolvíamos.

El pescado pica sutil mueve la boya suavemente, no traga violentamente nunca, hay que clavarlos en el momento justo.

Pasando ese horario decidimos probar donde rompía el viento, atándonos en una fila de palos hundidos, los que nos permitió pescar.

Durante una hora seguimos con líneas de flote intentando hacer la pesca en la modalidad que más nos gusta, probando a distintas profundidades y nos dimos cuenta que a 45 cm (que era la profundidad máxima que podíamos darle a nuestras líneas de flote era donde teníamos un poco de actividad (sabíamos que el peje estaba porque Rodrigo y estaban el finde pasado habían hecho una hermosa pesca (y de flote) pero no imaginamos que estarían tan abajo.

Rodrigo puso un paternoste y ahí estaban entre 80 y 1 m todos los piques, muchísimos y de todas las medidas, en mucha ocasión lográbamos dobletes, mucho peje para devolver y mezclados aparecían los lindos, tuvimos tres horas de buen pique y eligiendo logramos 70 piezas de medida entre las cuales había unos 15 pescados muy buenos.

Tomaban cualquier carnada, carnada viva, freezada, filet de sardina o de pejerrey, hasta pescamos con los gusanitos berkley de latex.

Nos puso muy contentos saber que a la laguna después de tantos años de redes y de no sentir nada de ella se la ve renacida, con mucho pescado que auguran (en caso de que se la cuide) buenos años venideros de pesca, repetimos para los que quieran visitar el espejo llevar wadders para embarcar, si no tendrán que mojárselos piecitos y la temperatura actual no está para eso.

Otra jornada de buena pesca, conociendo nuevos amigos que este deporte siempre te da y haciendo lo que amamos, pescar y comunicar.

Luego de unos mates regresamos a Nuestra ciudad como siempre felices de haber tenido otra día tremendo de pesca con amigos.

Un abrazo pescador

 

Luis O, Ventimiglia

Pescador apasionado

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