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Esta mañana, el presidente del Comité Alem, Lisandro Herrera, estuvo en el estudio de Chacabuco en Red, y allí compartió detalles sobre la nueva conducción del partido a nivel local y la importancia de la unidad para los próximos desafíos políticos.
Según explicó, la lista de unidad está encabezada por Mariano Alamán como presidente, Anabela Lala como vice, y Araceli Fernández y Agustín Cáceres ocupando también puestos clave en la mesa directiva.
“Es una mesa integrada, con representación de las localidades, lo cual es importante, y sobre todo con mucha gente nueva“, destacó Herrera, subrayando que no solo hay “sangre joven”, sino también nuevas personas tomando decisiones en el partido. “Es importante tener ese recambio”, agregó.
A nivel provincial, Herrera mencionó que no se pudo lograr la unidad debido a diferencias de ideas, pero reiteró su apoyo a la lista que encabeza Pablo Dominicini, “Futuro Radical”. También se refirió a la otra lista, liderada por Miguel Fernández, de quien habló en términos positivos, describiéndolo como “un gran dirigente del radicalismo y un excelente exintendente de Trenque Lauquen”, aunque aclaró que, en esta ocasión, se encuentran en lados opuestos de la competencia interna. “Después del 6, estaremos todos los correligionarios juntos para trazar un camino“, afirmó.
El proceso local
En cuanto al proceso que culminó en la lista local, Herrera explicó que se trata de “un cambio de conducción“, que hubo momentos de tensión, pero que el diálogo prevaleció. “Lo más importante de este último acuerdo de unidad fue que prevaleció la cordura y el reconocimiento a las distintas capacidades territoriales“, sostuvo. Según el dirigente, este reconocimiento territorial es clave para evitar que el partido se convierta en “una oficina de algún dirigente de turno“, subrayando que los líderes deben ser elegidos en función de su legitimidad frente a los afiliados y simpatizantes.
“Era importante que en Chacabuco empecemos a reconocer que los grupos que pretendan conducir los espacios tengan un reconocimiento territorial porque si no termina siendo una oficina de algún dirigente de turno y tal vez no es tan legítimo ese reconocimiento. Se representa a un partido, ese partido tiene afiliados, tiene simpatizantes, entonces el dirigente tiene que ser reconocido desde ahí, no desde un dedo que indique quien es el presidente o no. Es importante haber vuelto a ese esquema”.
Un nuevo ciclo
Pensando en el futuro, el presidente de la UCR Chacabuco enfatizó la importancia de una apertura partidaria. “No se trata de dirigentes, sino de una apertura partidaria”, indicó.
Herrera considera que el radicalismo local se enfrenta a una nueva etapa llena de oportunidades. “Lo que se viene son dos años de mucha participación y de nuevos actores, no solo de los viejos actores que hoy no están activos, sino también de gente nueva“, afirmó. Para Herrera, esta renovación es fundamental, ya que significa que hay “energía y posibilidades de involucrar a personas que antes no participaban”.
Con estos pasos, el dirigente espera que el radicalismo en Chacabuco esté mejor preparado para enfrentar los próximos desafíos electorales, con la mirada puesta en recuperar la intendencia en 2027.
Entrevista completa:
