La Ministra de Seguridad Patricia Burlich desató una cacería políticas/judicial de dirigentes piqueteros. Bajo su orden y del fiscal Pollicita se allanaron durante la noche locales de las organizaciones y casas particulares de militantes sociales. La denuncia se enmarca en la supuesta extorsión para movilizar y la venta de comida de los comedores. Se suma la estigmatización mediática. El objetivo es quebrar la organización de los que más luchan contra la motosierra de Milei.
Analicemos un poco para llegar al fondo de esto.
De las 9300 denuncias en el teléfono habilitado por la Ministra, solo se ratificaron en la justicia 7 casos. El conflicto se inicia el 20/12/23 en el marco de la primer marcha contra Milei y su gobierno ajustador. Desde noviembre 2023 (el gobierno de Fernandez ya venía incumpliendo las entregas) y hasta el día de hoy no se han enviado alimentos a ninguno de los 45.000 comedores populares que alimentan a 11 millones de personas en la Argentina. El movimiento piquetero reclama comida y trabajo genuino.
La extorsión de la que habla Bullrich es imposible de ejercer, las organizaciones no pueden dar de baja planes, solo el Ministerio de Capital Humano puede hacerlo. La que extorsiona es Burlich diciendo que si marcha le va quitar el plan, prohibiendole su derecho a manifestarse. Aquí vale destacar que se mezcla intencionadamente a las organizaciones con el manejo punteril que han ejercido intendentes, gobernadores peronistas y radicales en los barrios más humildes. El Polo Obrero lucha contra esos manejos, definiendo la organización en asamblea y aportando voluntariamente lo que cada uno pueda para comprar garrafas, alitas de pollo para agregar a la comida seca que enviaba el gobierno, para transportar la comida que llegaba a granel. Un método histórico de organización colectivo y desde abajo que nada tiene que ver con los punteros. Con respecto a negar comida, el Polo Obrero tiene la política de alimentar a todos los que se acercan sin importar de donde provengan, el problema real es la demanda creciente que genera que alcance cada vez menos de ahí las listas de espera.
Más allá de la calumnia mediática, los compañeros del Polo son trabajadores desocupados y precarizados honestos, no los millonarios corruptos que plantea Bullrich. Elige a este enemigo en vez de luchar contra el narco que avanza en los barrios. La justicia de clase allana comedores en barrios humildes, pero no hace nada contra los narcos, los que fugan dinero al exterior. Tapan el tratamiento de la nefasta Ley de Bases que profundizará la miseria y las luchas. Para nada esto doblegará a los compañeros, hay que redoblar la lucha. Bullrich y Milei pasarán a la historia como los que atacaron a los pobres por tener hambre, la lucha de los trabajadores va a prevalecer. Rechazamos esta campaña política, judicial y mediática de ataque a los compañeros, defendemos a los piqueteros que enfrentaron a todos los gobiernos hambreadores. La salida es el trabajo genuino y no el plan de saqueo de Milei, esto solo vendrá con un gobierno de trabajadores.
No a la persecución a dirigentes piqueteros, comida para los comedores, trabajo genuino. No a la Ley de Bases, paro general cuando se trate en el Senado.
Partido Obrero – Frente de Izquierda Unidad
Defienden a delicuentes, deja que sean investigados y si están limpios no pasa nada, pero claro, están todos metidos, más sucios que un pozo de baño, espero les llegue a ustedes también, un abrazo